Ir al contenido principal
Lo que intento decirte es que entiendo lo que es sentirse... 

El ser más pequeño, insignificante y patético de la humanidad y lo que es sentir dolor en partes del cuerpo que ni siquiera sabías que tenías.


Y da igual cuántas veces te cambies de peinado ...

O a cuántos gimnasios te apuntes, o cuántos vasos de Chardonnay te tomes con tus amigas.

Porque sigues acostándote todas las noches repasando TODOS los detalles!



Y preguntándote qué hiciste mal o qué pudiste malinterpretar.
En ese breve instante pudiste pensar que eras tan feliz
A veces incluso logras convencerte de que EL verá la luz y se presentará en tu puerta.


Y después de todo eso y aunque esa situación dure mucho tiempo, vas a un lugar nuevo y conoces a gente que te hace recuperar tu amor propio.


Vas recomponiendo tu alma pedazo por pedazo.



Y al final...


Toda esa época difusa, esos años de tu vida que has malgastado, empiezan por fin a desvanecerse.

                                                                        

Entradas populares de este blog

Que no azoten más pesadillas en el alba de la vida Imágenes borrosas penetran mis sienes Y quiero romper con mis dientes todo hilo que nos une Porque ya está, ya fue Sos un simple vestigio  Que de vez en cuando quiere seguir en mi camino Y a lo lejos se escuchan versos cantados con tu risa maquiavélica Queriendo asustarme y deletreando palabras que intentan quebrarme pero  Para tu sorpresa ya no perteneces, ya no existis tu muerte fue prematura y estoy en paz al fin
Los segundos transcurren, no se detienen para nadie. Las estaciones pasan, los días pasan a veces sin darnos cuenta. Es algo distinto estar al borde de las alturas que estar frente a tu boca. No me contaron lo difícil que sería alcanzarla. Los minutos transcurren, no se detienen para nadie. Las motos pasan, la gente pasa a veces sin darnos cuenta. Es algo distinto estar a cuatro mil metros de altura que estar en frente de tu mirada. No me dijeron lo dificil que sería que me vieras.
Tu boca de terciopelo. Tan prohibida. La persigo en sueños de día. Mientras miro a lo lejos, deseando poder verte de nuevo aunque no estemos encaminados. De alguna cierta forma siempre volvemos a encontrarnos. Tus ojos con los míos... los tuyos tan lindos que quisiera nadar en ellos como si fueran un lago tibio en un día otoñal. Pasaría todas las estaciones del año a tu lado aprovechando cada segundo de tu aroma que me atrapa cada vez que nos citamos escondidos bajo un árbol dándonos amor.