Bésame en el adiós intercambiado detrás de una ventanilla con nuestras manos pegadas y las lágrimas caminan por la comisura de mi boca temblorosa. No quiero perder a nadie menos a ti. Te convertiste en lo que más anhelo día y noche. Me rompe el alma saber que dependo de tu lejanía y tus palabras. No quiero girar alrededor tuyo, no quiero involucrarme de más porque termino bebiendo agonía.
Que no azoten más pesadillas en el alba de la vida Imágenes borrosas penetran mis sienes Y quiero romper con mis dientes todo hilo que nos une Porque ya está, ya fue Sos un simple vestigio Que de vez en cuando quiere seguir en mi camino Y a lo lejos se escuchan versos cantados con tu risa maquiavélica Queriendo asustarme y deletreando palabras que intentan quebrarme pero Para tu sorpresa ya no perteneces, ya no existis tu muerte fue prematura y estoy en paz al fin