Estoy sola en mi casa. Camino o al menos trato mover mi cuerpo como sea por una taza de té. En esta relación siempre me sentí sola entonces no creo que va a ser un problema abrazar la soledad. Mientras acomodo mi ropa en los cajones de mi pieza, mi mente me dice cosas tales como
"hiciste bien en dejarlo"
"¿estas dejando ir a tu alma gemela?"
"¿vas a aguantar verlo con otra?"
"no volverá a hablarme más y me odia"
"es por tu bien ana te estabas muriendo en vida con él"
"no era el amor de tu vida y lo sabes si fuera el amor de tu vida no te haría sentir tan mal"
Y otras cosas más que no tengo el tiempo ni la fuerza para enumerar, sólo lloro hay momentos en el que siento que quedé seca de tanto llorar.